¿Sigue vigente el Bono Alquiler Joven 2025? Quién puede solicitarlo y cómo

El acceso a la vivienda se ha convertido en un desafío significativo para los jóvenes en regiones como Baleares, Madrid, Cataluña y Canarias, donde el coste de los alquileres supera con creces el salario medio. Según un informe del portal inmobiliario Pisos.com, los jóvenes con un salario medio de 1.050,77 euros al mes destinan la totalidad de sus ingresos al alquiler en estas zonas. En Baleares, por ejemplo, el alquiler medio de 1.615,35 euros deja a los jóvenes con una deuda mensual de 564,58 euros, mientras que en Madrid, el alquiler de 1.556,34 euros resulta en un déficit de 505,57 euros.

La precariedad laboral y los altos precios de la vivienda han elevado la edad media de emancipación en España a 30,4 años, una de las más altas en la Unión Europea. Aunque en regiones como Aragón, Andalucía y Castilla-La Mancha los alquileres son más asequibles, con precios entre 250 y 660 euros, la precariedad laboral y el bajo nivel salarial hacen que compartir piso sea la única alternativa viable para muchos jóvenes. Esta situación revela la dificultad creciente para los jóvenes españoles de independizarse y mantener un nivel de vida adecuado.

Bono Alquiler Joven 2025

El Bono Joven del Alquiler es una iniciativa del Gobierno para aliviar la carga económica de los jóvenes al alquilar una vivienda, especialmente en un contexto de creciente subida de los precios de alquiler. El programa busca reducir la edad de emancipación y facilitar el acceso a una vivienda digna. Esta ayuda forma parte de la Ley Estatal de Vivienda y proporciona un cheque mensual de 250 euros para cubrir el alquiler de una vivienda, con un límite de 600 euros en rentas normales y 900 euros en zonas tensionadas.

El bono está dirigido a jóvenes de entre 18 y 35 años, una franja de edad considerada vulnerable en términos de acceso a la vivienda. Para beneficiarse, los solicitantes deben cumplir ciertos requisitos: tener entre 18 y 35 años, ser titular o cotitular del contrato de alquiler de una vivienda o habitación, y contar con rentas de trabajo inferiores a 23.725 euros anuales (tres veces y medio el Iprem). Además, la renta de alquiler no debe superar los 600 euros mensuales. La solicitud de la ayuda también requiere entregar la documentación correspondiente y, en muchos casos, estar empadronado en la vivienda en cuestión.

El Bono Joven del Alquiler sigue vigente en 2024, aunque la mayoría de las comunidades autónomas han cerrado el plazo para nuevas solicitudes. Inicialmente establecido para 2022 y 2023, el Gobierno extendió el programa debido a la persistente crisis habitacional juvenil. Aunque la medida fue ampliada, todavía se espera que las comunidades autónomas publiquen nuevas convocatorias y asignen presupuestos para 2025. Los interesados deben revisar la web de la consejería de vivienda de su comunidad para verificar plazos y disponibilidad, ya que los trámites pueden estar abiertos o cerrados dependiendo del momento.

Precio del alquiler

El aumento en el precio del alquiler en España ha llegado a ser uno de los principales obstáculos para acceder a la vivienda, situando al país en el decimocuarto lugar en Europa en cuanto a la proporción de personas que eligen alquilar para independizarse. Esta situación contrasta con países como Alemania, Austria y Dinamarca, donde el número de viviendas en arrendamiento es significativamente mayor.

En julio de 2024, el precio medio del alquiler en España alcanzó los 13,1 euros por metro cuadrado, una ligera disminución del 1,6% respecto al mes anterior, pero un aumento del 10,4% en comparación con el año pasado. Las comunidades autónomas presentan una variabilidad significativa en los precios: Islas Baleares es la más cara con 18,9 €/m², mientras que Castilla-La Mancha y Extremadura son las más económicas con 7,1 €/m². Esta disparidad refleja las diferencias regionales en el mercado de alquiler.

Plan Estatal de Vivienda 2022 – 2025

El Plan Estatal de Vivienda 2022-2025 tiene como principales objetivos facilitar el acceso a la vivienda para los ciudadanos con menos recursos a través de ayudas directas al alquiler. Esto incluye apoyar a las personas víctimas de violencia de género, desahuciadas, sin hogar, y otras personas vulnerables, mediante ayudas para el alquiler y los gastos de suministros y comunidad que pueden llegar hasta el 100%.

Además, el plan busca mejorar el acceso a la vivienda para los jóvenes, ofreciendo mayores ayudas al alquiler y asistencia para la adquisición de viviendas en municipios pequeños. Para fomentar la oferta de vivienda en alquiler, el plan también contempla ayudas a los arrendadores para cubrir el coste de seguros de protección de la renta arrendaticia.

En cuanto a los objetivos a medio plazo, el plan se enfoca en incrementar la oferta de vivienda en alquiler social mediante el impulso del parque público de vivienda. También se pretende aumentar la oferta a través de la disponibilidad de viviendas de la SAREB y otras entidades públicas. Estas medidas están diseñadas para abordar tanto la necesidad inmediata de vivienda como para fortalecer la oferta a largo plazo, sobre todo en áreas con menos población.